viernes, 7 de agosto de 2009

Date cuenta, al menos una vez.. cuanto me dañas. No es tan fácil para mí como lo es para tí. Muchas noches me juré decirte adios, pero aún estás y me pregunto el por qué. Por qué sigues acá, sin nada que hacer y sin ningun rumbo. Llevandome al más grande extasis y sin embargo me dejas caer, y no te importa, no te importa... nada. Necesité muchas veces de tus palabras, pero ni siquiera me dejabas decir lo que quería expresar. Necesito de tu sinceridad y de un dudable adios. Dudable porque sufriré más que ahora... ahora que tengo la esperanza de que aún estés conmigo, de aún tenerte aunque muy en el fondo sé que no estás acá! QUÉ ES LO QUE QUIERES! Dejame tranquila! Maldito! Mal hombre! Insesible!

No.. tu sabes que no quiero eso, cuanto me gustaría desearlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario